Débil
destino amanecía,
¡torpe
chiflada!
En
ésta hora máxima del silencio,
SOY
ambrosía impensada.
Injerto
del doble corazón,
porfía
de mil manadas,
emerjo
del Rayo,
¡no
me dejo ver!
¿Quién
me sigue?
Sendero
inaccesible SOY.
¡VELA
RELUCIENTE! ¡NAVÍO INMORTAL!
¡Búscame
si sabes!
¡Si
osas, tú!
Virgen
Luz impenetrable,
acordes
de mil años,
¡inspiro
eternos efluvios!
¡aspiro
yemas nacaradas!
¡MI
RUMBO ES DIAMANTINO!
¡MI
ODA DEVORA EL OCASO!
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario